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La Guerra de los Diez Anos: La Primera Guerra de Cuba
Contributor(s): Alcazar Segura, Agustin (Author)
ISBN: 1535422572     ISBN-13: 9781535422574
Publisher: Createspace Independent Publishing Platform
OUR PRICE:   $19.00  
Product Type: Paperback
Language: Spanish
Published: July 2016
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Additional Information
BISAC Categories:
- History | Caribbean & West Indies - Cuba
Physical Information: 0.75" H x 5.98" W x 9.02" (1.06 lbs) 360 pages
 
Descriptions, Reviews, Etc.
Publisher Description:
Durante las guerras de independencia en el resto del continente, Cuba permaneci leal a Espa a, pero la raz n hay que buscarla en el gran n mero de esclavos existentes en la isla y el temor a una repetici n de lo ocurrido en Hait . Pero ser a iluso pensar que el ejemplo dado por los territorios continentales no influir a en las Islas, y ya en 1823 se cre una logia cubana, los Soles de Bol var, formada por criollos que deseaban la independencia de Cuba. Incluso desde M xico y la Tierra Firme se tramaron conspiraciones para separar la isla de Espa a, si bien la habilidad de los capitanes generales pudo frustrarlas prolongando durante unos a os la adhesi n de la Gran Antilla a Espa a. Sin embargo, por dictamen de 10 de Febrero de 1837 las provincias de Am rica y Asia, en lo sucesivo, deb an regirse y administrarse por leyes especiales y sus diputados no tomar asiento en las Cortes. A pesar de las protestas planteadas ante las Cortes, stas no fueron atendidas, quedando la Isla sometida a un r gimen que en lo fundamental estaba en maŽnos de los Gobernadores Generales, que a la vez ejerc an las funciones de Capitanes Generales. Los pol ticos de la Pen nsula no sent an las aspiraciones de la sociedad cubana de intervenir en su futuro, ni la creciente influencia del poderoso vecino del Norte, los Estados Unidos, sobre el comercio y el progreso de la Gran AnŽtilla. Ten an suficiente con nombrar a los que ocupaban los cargos administratiŽvos, que desgraciadamente en muchas ocasiones reca an en quienes no ten an la preparaci n necesaria o s lo buscaban la f cil y r pida fortuna. Ser a a partir de entonces que empezar a a manifestarse en Cuba la aparici n de las tres corrientes de opini n contrarias a la pertenencia a Espa a: la anexionista, la autonomista y la separatista. Pese a que sucesivos capitanes generales, como Roncali, el Marqu s de La Habana o el General Serrano expusieran al gobierno la necesidad de establecer una serie de reformas en la adminisŽtraci n que satisficieran las aspiraciones de los cubanos y que les apartaran de las ideas independentistas, lo cierto es que no se avanz lo necesario para satisfacer la marea incontenible que marcaban los nuevos tiempos. A los incipientes deseos internos de emancipaci n habr a que a adirles las apetencias anexionistas de Los Estados Unidos y de Gran Breta a. Sin embargo, por parad jico que pueda parecer, la propia debilidad espa ola en el concierto internacional contribuy a que se prolongase nuestro dominio sobre la Isla. La pugna por la Gran Antilla se mantuvo hasta mediados del siglo XIX, pero m s tarde, conscientes ambas potencias de la oposici n de la otra a su ocupaci n, optaron por una aparente neutralidad, aceptando la prolongaci n de la d bil Espa a como soberana de la isla. Todo ello se hizo realidad tres a os m s tarde cuando aprovechando la convulsi n que se produjo en la Pen nsula como consecuencia de la Revoluci n de 1868, estall la insurrecci n en Cuba. Con la marcha de la Reina, se inici para Espa a un espacio de seis a os denominado Sexenio Revolucionario, esto es, el que medi entre el destronamiento de Isabel II y la Restauraci n de la monarqu a borb nica en la persona de su hijo Alfonso XII. La Revoluci n de 1868 fue el detonante de la primera gran insurrecci n en Cuba. Ya a lo largo de los a os anteriores se hab an producido algunos movimientos, r pidamente atajados, pero la situaci n se manten a en una tensa calma que la ca da de Isabel II vendr a a romper. En la noche del 9 al 10 de Octubre de 1868 lanzaba C spedes su "Grito de Yara", que marcaba el inicio de una campa a que durar a diez a os y costar a a Espa a del orden de las 65.000 bajas, la mayor parte debidas al clima. La insurrecci n cubana se hab a iniciado y a trav s de tres conflictos sangrientos (Guerra de los Diez A os, Guerra Chiquita y Guerra de la Independencia) que llenar an lo que quedaba del siglo,