Cine de Zombis y Fantasmas Contributor(s): Agusti, Adolfo Perez (Author) |
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ISBN: 1491084375 ISBN-13: 9781491084373 Publisher: Createspace Independent Publishing Platform OUR PRICE: $11.40 Product Type: Paperback Language: Spanish Published: July 2013 |
Additional Information |
BISAC Categories: - Art | Film & Video |
Physical Information: 0.47" H x 5.98" W x 9.02" (0.67 lbs) 222 pages |
Descriptions, Reviews, Etc. |
Publisher Description: Son tan terror ficos que ni siquiera aparecen en nuestros sue os m s espantosos, y aunque las leyendas populares les suelen definir con bastante precisi n, al menos en cuanto a su capacidad para devorar, descuartizar y, en suma, matar a los infelices humanos que se ponen por delante, solamente el cine ha sido capaz de hacerles realidad. Los zombis, los fantasmas y el resto de los engendros, poseen un aspecto tan desquiciado como su comportamiento, siendo casi imposible encontrar entre ellos a alguien tan seductor como, por ejemplo, Dr cula, el icono del cine de terror. Y aunque dicen que sobre gustos (y disgustos) no hay nada escrito, resulta dif cil encontrar a un bello ejemplar en ese muerto viviente que avanza hacia nosotros con los ojos fuera de sus rbitas pidiendo morder un cerebro fresco; o en Freddy Krueger, el m s gamberro de todos, quien cuando entra en nuestros sue os disfruta resbalando por las paredes su afilada garra. Afortunadamente los hay que llevan caretas que ocultan su deformado rostro, aunque sabemos que lo que esconden es a n m s horrible que aquello que muestran. Como ejemplos de ello tenemos a Jason y Michael Myers, dos monstruos que en su d a fueron humanos, y que solamente una anormal vida anterior les hizo tan malvados e imaginativos en el incruento arte de matar. Decididamente maliciosos y con deseos de introducirse literalmente en nuestras vidas y cuerpos, estos monstruos creados por la imaginaci n de escritores y guionistas de mente f rtil suelen ser muy torpes, por lo que huir de ellos solamente es cuesti n de tener buenas piernas, salvo que antes nos las hayan cortado con un oxidado machete. Por ello, y por si acaso los encontramos un d a en cualquier esquina, vamos a repasar ahora aquellos que ya figuran en todas las buenas galer as del terror, esencialmente las que se pueden ver cuando estamos c modamente sentados y protegidos en la sala de un cine. |