¿Cómo utilizar el método de observación? Sistema de Guías para la observación del desempeño profesional docente Contributor(s): Bermúdez Sarguera, Rogelio (Author), Rodríguez Rebustillo, Marisela (Author) |
|
![]() |
ISBN: 3668448701 ISBN-13: 9783668448704 Publisher: Grin Verlag OUR PRICE: $53.11 Product Type: Paperback Language: Spanish Published: June 2017 |
Additional Information |
BISAC Categories: - Education |
Physical Information: 0.16" H x 5.83" W x 8.27" (0.22 lbs) 68 pages |
Descriptions, Reviews, Etc. |
Publisher Description: Documento del a o 2017 en eltema Pedagog a - Did ctica general, objetivos de la educaci n, m todos, Nota: Ninguna, Universidad Metropolitana del Ecuador, Idioma: Espa ol, Resumen: Nuevo enfoque sobre le denominado m todo de observaci n. Su aplicaci n en la evaluaci n de la gesti n profesional del docente universitario. La observaci n ha sido siempre clasificada como uno de los m todos emp ricos por excelencia, al igual que el experimento, dentro de la concepci n metodol gica de la investigaci n cient fica. Por esta raz n, nos vemos en la necesidad de defender una vez m s la naturaleza emp rica que a la observaci n se le adjudica o de abjurar de tales posiciones bajo determinados fundamentos te ricos coherentes. Asimismo, en el an lisis no debe pasar inadvertido la propia definici n que sobre la observaci n se tiene. Consider ndola como percepci n especial, la observaci n ha sido elevada a un lugar epist mico que no le corresponde y que puede ser cuestionada a ra z de las preguntas siguientes. Qu razones existen para conceptualizar como observaci n la ejecuci n que la persona realiza a nivel perceptual?, se hace necesario esgrimir su car cter premeditado, es decir, consciente, como argumento definitorio de su tan cacareado car cter especial? Si tomamos como silogismos de nuestro razonamiento el hecho de que, al devenir observaci n, a la percepci n le es inherente el car cter premeditado o mediato y, al mismo tiempo, advertimos que el pensamiento tambi n se caracteriza por dicho car cter mediato, a prop sito, criterio m s defendido para lograr diferenciarlo de aquella, entonces, no podr a ser admitido, por analog a, el hecho de que la observaci n y el pensamiento sean una y la misma cosa? Cu l ser a la validez psicol gica y l gica de esta conclusi n? Si, por el contrario, defendemos la naturaleza ineluctablemente diferente de cada uno de estos objetos de estudio ps quicos, cu l ser a la relaci n necesaria que habr a de establecerse entre ellos? En ltima |